Toledo, ciudad carpetana, capital del reino visigodo, ciudad imperial y cuna de la convivencia de "Las Tres Culturas"
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Con un legado histórico, cultural y patrimonial increíble, digno de ser saboreado despacio. Al cual voy a aproximarme con varias entradas
Actual sede de las Cortes regionales de Castilla-La Mancha, su casco histórico está situado en el margen derecho del río Tajo, en una colina rodeada por un pronunciado meandro
La Casa-Museo del Greco se sitúa en el corazón de la judería toledana. Perteneció a Samuel ha-Leví, tesorero del Rey Pedro I de Castilla y, con posterioridad, fue del Marqués de Villena
Única de España dedicada a la figura del pintor, tiene como finalidad esencial transmitir y hacer comprensible a la sociedad la figura del Greco, así como la influencia de su obra y personalidad en el Toledo de comienzos del s. XVII
Patio de la casa, decorado con yeserías de estilo mudéjar, azulejería en los zócalos, rejas de época en las ventanas y tinajas renacentistas
Cocina, el edificio constituye un bello conjunto que da idea de cómo era una casa acomodada de los ss. XVI-XVII
Capilla, con un retablo que aloja una pintura al óleo de San Bernandino
Cubierta mudéjar de la capilla
Por extraño que parezca, la figura del Greco fue controvertida en su tiempo y relegada tras su muerte porque su obra dejó de gustar. Su reivindicación como uno de los grandes maestros de la pintura española se inicio en Europa a mitad del s. XIX debido a un grupo de artistas e intelectuales. La revalorización de su obra e investigaciones sobre su vida inspiraron el proyecto de la casa-museo y con ello se contribuyó al nacimiento de un mito
Vista y plano de Toledo, obra del Greco datado entre 1610 y 1614. Con este cuadro el autor contribuyó a la difusión de la nueva imagen renacentista de la ciudad
Las lágrimas de San Pedro realizado hacia 1587-1596. Óleo sobre lienzo. El Greco (1541-1614)
Sala del Apostolado con los retratos de Jesús y los doce apóstoles, obras del Greco. Este Apostolado es uno de los tres juegos, realizados por el cretense, que se conservan completos. Es el de mayor calidad y está formado por trece cuadros, que muestran la capacidad del autor en idear personajes de gran humanidad y carácter ejemplar, plenos de dignidad y nobleza
Santiago el Mayor.
San Pablo
San Pedro
San Juan
Santiago el Joven
San Mateo
San Andrés
San Bartolomé
San Simón
Santo Tomás
San Judas Tadeo
San Felipe
La casa conserva las cuevas subterráneas medievales
Único resto conservado del palacio construido por Samuel Ha-Levi, tesorero de Pedro I, a mediados del s. XIV
Las galerías abovedadas distribuidas en dos plantas constituyen el sótano y semisótano del palacio
Aquí se instalaron una serie de almacenes y un importante baño ritual con sus correspondientes aljibes
En Toledo en sí y principalmente en la judería, existe una ciudad subterránea, horadada y llena de leyendas que la envuelve
Haciendo de las cuevas una referencia legendaria de la mítica ciudad de Toledo
Muchas casas toledanas albergan en sus sótanos aljibes para almacenar agua de la lluvia o almacenes para sus inquilinos
Además de otros lugares donde se oculta "el otro Toledo", oscuro, húmedo y misterioso
Subterráneos que han sido moldeados desde hace siglos, por las diferentes civilizaciones que han vivido en este promontorio rocoso
En las calles estrechas del centro dedicadas al comercio se pueden visitar algunos subterráneos teatralizados
Que mantienen la esencia de la construcción de ladrillo como se ve en las iglesias mudéjares de la ciudad
Este dedicado a exhibir las diversas armas de tortura de la inquisición es uno de ellos
Termas Romanas, esta zona arqueológica comprende un monumental complejo termal e hidráulico publico romano del s. I, II d.C. que se situó en el centro de la antigua ciudad romana de Toletum
Pudo alcanzar una extensión mínima de 2000 m², albergó las típicas instalaciones balnearias romanas
Así como galerías de servicio para el mantenimiento del complejo termal
El conjunto termal se encuentra delimitado por dos conjuntos de cisternas tricamerales conectadas entre sí por una gran canalización abovedada
Otros conductos abovedados complementarios sugieren un complejo sistema de suministro y abastecimiento de aguas limpias
Puzle de restos arqueológicos ocultos bajo casas y calles desde hace siglos
Que se va completando poco a poco gracias a la labor del Consorcio de Toledo
Poniéndolos en valor
Santa María la Blanca
Un templo construido en el barrio judío de Toledo en el 1180, como sinagoga que funcionó como tal durante 211 años
Existe cierto contraste entre la sobriedad del exterior de la sinagoga y su elaborado interior
Sus elementos arquitectónicos incluyen paredes blancas y lisas hechas de ladrillo, pilares octogonales con zócalos de azulejos, decoración geométrica en los frisos y vegetal en los capiteles de los pilares. Todas estas características y la distribución de los espacios, con sus naves formadas por la sucesión de arcos de herradura soportados por pilares, tienden a recordar la tipología propia de una mezquita
Ornados de piñas y volutas, sus capiteles denotan influencia del arte románico
Los treinta y dos pilares de este templo son de ladrillo recubierto por cemento y cal
En la cabecera, la unión de las naves se hace con curiosos arcos túmidos
Por encima de los arcos de herradura prevalece la ornamentación abstracta en frisos horizontales que incluye molduras con delicados motivos basados en la interacción de líneas y medallones y sobre ellos, arquerías ciegas de arcos polilobulados
Artesonado mudéjar con armadura de par y nudillo formando la cubierta de la nave central
Bóveda renacentista. En la cabecera de la nave central de la Sala de Oración, compuesta, en su parte central, por una cúpula gallonada asentada sobre una franja octogonal de casetones y florones. Cuatro pechinas soportan la estructura anterior sirviendo de elementos de transición entre el octógono y el cuadrado de la base
Bóveda de cuarto de esfera, en forma de venera, situada en la cabecera de la nave de la Sala de Oración, obra de estilo renacentista, realizada en el s. XVI, cuando se acometió la reforma del edificio por el arquitecto toledano Alonso de Covarrubias
Sinagoga del Tránsito
Situada en la judería, es un edificio del s. XIV erigido bajo el mecenazgo del tesorero del rey Pedro I, Samuel ha-Leví
Considerada la más bella sinagoga medieval y mejor conservada en el mundo. La obra maestra de la colección del museo es la propia sede: la Sinagoga
Jardín de la Memoria, con laudas sepulcrales hebreas. Se trata de un patio organizado a modo de necrópolis, en el que se exponen algunas de las lápidas sepulcrales conservadas en el Museo
La Gran Sala de Oración ornamentada con arquillos que permiten la entrada de luz exterior y frisos de yeso policromados decorados con motivos vegetales, geométricos y epigráficos, además de motivos heráldicos de la Corona de Castilla
El alzado se divide en dos plantas, la inferior es la zona donde se situaría la zona del rito y en la zona superior se aprecia la ubicación del lugar dónde se ponían las mujeres, que ocultas de los hombres por celosías, asistían a la liturgia
El Hejal, lugar sacrosanto cubierto con una cortina, situado en el testero de la Gran Sala de Oración, donde se guardaba los Rollos de la Torá
Paño decorativo con la placa fundacional con el nombre de Samuel ha-Leví (fundador de la sinagoga) en caligrafía hebrea
Pies de la la Gran Sala de Oración
Friso con yesería mudéjar, decorada con motivos vegetales y el escudo de Castilla y Aragón, sobre él, ventanas alternando con vanos ciegos, enmarcados con arcos polilobulados apoyados sobre dobles columnas
Detalle de la yesería mudéjar de la Galería de Oración de las Mujeres
Actualmente el edificio es sede del Museo Sefardí de Toledo, recordando la comunidad judía que vivió en la Península Ibérica hasta su expulsión y también a sus descendientes, quienes, más allá de residir en territorio ibérico o en otros puntos del planeta, permanecen ligados a la cultura hispánica
Reproducción de las llaves históricas entregadas por el caudillo musulmán Abul Hasan al rey cristiano Fernando III "el Santo", cuando conquistó Sevilla en 1248. Aparece la inscripción en hebreo: -El Rey de los Reyes abrirá, el Rey de toda la tierra entrará
Lápida de la necrópolis judía
Ladrillo con inscripción funeraria que recoge formulaciones de la "hascabá" u oración que los antiguos judíos toledanos recitaban a sus difuntos
La Torá. Estuche donde se guardan los textos sagrados hebreos
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