Benasque Valle

 Benasque ValleValle que se sitúa en la esquina noreste de Huesca, en la comarca de La Ribagorza, en plena cordillera de los Pirineos y alberga el mayor número de cimas de 3.000 m.


Con una sucesión de pequeños pueblos de piedra entre cumbres de un Pirineo agreste y bello


Benasque

Es la principal población del valle. Está situado en el pleno corazón de los Pirineos


Filológicamente es conocido por ser el lugar de encuentro del catalán, del aragonés y del gascón y hablarse un habla de transición llamado benasqués o patués


El clima de Benasque es de Alta montaña, con veranos templados e inviernos fríos con temperaturas bajo cero y nevadas frecuentes


Es centro neurálgico del Valle de Benasque, llamado también el "Valle Escondido", y municipio destacado de la comarca


Parte de su término municipal está ocupado por el Parque natural Posets-Maladeta y el Monumento natural de los Glaciares Pirenaicos


El Románico Lombardo, el estilo arquitectónico característico de Benasque


Se puede apreciar en bellas y a la vez austeras construcciones y se remonta a los edificios realizados por maestros procedentes de la Lombardía


Este es el caso de la Iglesia de Santa María la Mayor, construida en el s. XIII, pero cuya atribución es difícil de asignar, si a los maestros lombardos, a los maestros locales o a ambos


En muchas ocasiones, el éxito de estas iglesias lombardas fue tal que los maestros de obras locales siguieron utilizándolas como modelo durante mucho tiempo


El interior de la iglesia actual es fruto de varias remodelaciones, destrucciones y reconstrucciones. Quedando una planta de cruz latina dividida en cuatro tramos, con crucero y cabecera recta orientada al este


Con capillas laterales, cuatro en el lado del evangelio y tres en el de la epístola


Alberga retablos, tallas y pinturas de distintas épocas, reflejo de la devoción local. Destacando la del altar mayor con una pintura dedicada a la Asunción de la virgen María


La torre se encuentra adosada a la iglesia y está ricamente decorada por el exterior. En la cúspide hay una pequeña figura de un crucificado. durante la Guerra Civil fueron arrojadas al vacío las campanas centenarias de la torre. La campana mayor "La Marciala", estaba entre ellas y gracias al esfuerzo de los vecinos se reemplazó por una réplica en el año 2007


Portada ricamente ornamentada que muestra escenas bíblicas y motivos decorativos típicos del románico aragonés. Sobre la cual sobresale un gran óculo


El óculo decorado. En la parte superior del mismo se encuentra San Marcial con los brazos en cruz, patrono de Benasque, y en la inferior se encuentra el antiguo escudo de Benasque. En el lado izquierdo encontramos un perro con cinco patas y en el derecho un hombre una cabeza que podría recordar a la de un dragón


Casa de la Vila de Benás/Benasque. Un espacio municipal clave en el corazón de la ciudad. con un curioso pavimento con losas, algunas de ellas de losas negras que representan el camino del baile ancestral del "val de Vás", decorando la plaza del Ayuntamiento


Foto - collage de portadas y detalles arquitectónicos de edificios singulares


Casa Faure, una casa palacio fortificada de la población. construida durante los ss. XVI-XVII sigue un patrón similar a las casas torreadas del Alto Aragón, con un plano de casa con patio central rodeado de edificios auxiliares fortificados contrapuestos a la fachada


Casa Juste. Casona medieval con entrada adovelada y matacán aspillado y una gran torre de merlones y almenas, conocida como torre de los Infanzones


Palacio fortificado de los Condes de Ribagorza, un edificio de estilo renacentista del s. XVI. Con un importante garitón en una de las esquinas de la fachada principal


También conocido como Casa Albar. Está ubicado en la calle Mayor y presenta una arquitectura montañesa con influencias renacentistas. Edificio rehabilitado y ahora funciona como un centro cultural. Actualmente, alberga exposiciones temporales y eventos culturales


Calle Las Plazas, uno de los paseos para disfrutar


Paseando por la calle Mayor vemos un centro de actividades de multiaventura, recomendable si quieres disfrutar en el río Ésera u otras actividades en una naturaleza tan privilegiada


Torre de la Cárcel. Construcción de mampostería que data del s. XIII. Originalmente, formaba parte de la muralla que protegía la villa. Se utilizó como cárcel hasta el s. XVIII


Grabados en el suelo hallamos tres relieves que simbolizan: la nieve y el esquí (representado en un esquiador de fondo),  En los tres relieves, separados entre sí por pocos metros de distancia, encontramos la firma del autor, Pedro Anía Gerez


En la segunda, vemos la fauna de la zona (con imágenes de cinco animales, sarrio, ardilla, jabalí, ciervo y corzo) 


Y la tercera la flora, (con la imagen de una flor de nieve)


Puente Medieval. Puente de origen románico datado en el s. XI, que permite la entrada en la villa salvando la corriente del río Ésera. Reformado en el s. XIV en estilo gótico y reformado y reconstruido varias veces como consecuencia de fuertes avenidas


Anciles

Desde Benasque hay que acercarse a una de sus pedanías: Anciles


Siguiendo el cauce del Ésera en un cómodo sendero por su margen


Se puede llegar a Anciles, Ansils en patués, dando un agradable paseo de sólo 2 kilómetros. El camino se inicia en el puente sobre el río Ésera que hay a la entrada de Benasque, y discurre paralelo al río en dirección sur, apreciando unos bonitos parajes


Aunque su tamaño le aproxima más a una aldea que a un pueblo, el maravilloso conjunto de casas que reúne y su estado de conservación hacen que su visita sea imprescindible


El pequeño casco urbano, compacto y extremadamente limpio, está formado mayoritariamente por grandes caseríos señoriales pertenecientes a los ss. XVI y XVII. En ese tiempo los poderosos ganaderos de Benasque, decidieron construir sus nuevas mansiones en Anciles, casi un barrio de Benasque. Era una forma de alardear públicamente de las riquezas materiales


Los tejados en escalera son una de las característica arquitectónicas particulares que se ven en muchas de las edificaciones


Iglesia de Anciles, dedicada a San Pedro Apóstol. Ocupa uno de los edificios más céntricos y está totalmente integrada en el pueblo, ya que se accede a ella a través de una pequeña plaza que también da paso a otras viviendas


Consta de una nave rectangular dividida en tres tramos, con cabecera semicircular y tres capillas a cada lado, bóveda de medio cañón en la nave con dos arcos fajones de medio punto que apean en las ménsulas por encima de las capillas. Conserva su ábside románico primitivo, realizado exclusivamente con cantos rodados o bolos que son muy abundantes en la zona


Villanova

Emplazado en el Valle del Ésera, en su ribera derecha, se acuesta sobre la Sierra de Chía y frente al Pico de Eresué


Esta joya del medievo aragonés está formada por intrincadas callejuelas que conforman un casco urbano muy bello


Se conocen documentos que hablan de Villanova ya en los años 1006 y 1010 donde "Guinda vende una viña a Enardo en un lugar llamado Billanue del Valle de Sos". También en 1017, "el señor Enardo compra otra viña en Billanue a Bonofilo de Sos". Estos documentos muestran la larga historia del lugar y, parte de esa historia, queda reflejada en su arquitectura




Las casas son la mejor muestra del íntimo equilibrio que, a lo largo de muchos siglos, acabó por establecerse entre la cultura tradicional y el medio natural sobre el que se sustentaba


Sus materiales son los que se hallaban en su entorno y la distribución de sus dependencias se adaptaba perfectamente al trabajo agrícola y ganadero


Dos bellos ejemplos de esta arquitectura popular son Casa Betrán, una monumental casa-patio ...


... Y Casa Riu, una casa retablo repleta de cuidados detalles ornamentales en su fachada


Uno de los mejores ejemplos conservados de las antiguas casas del Valle de Benasque, ya que reúne una serie de elementos constructivos y ornamentales de gran valor etnográfico

Villanova es mucho más que una suma de duplicidades; se trata de un pueblo de fuentes, casas cuidadas y, en su parte antigua, rincones que rezuman romanticismo


Fuente La Iglesia


La Fontaneta


Fuen de Sara


Fuen de Alto


El ordenamiento urbano de Villanova, que se va encaramando sobre una ladera poblada de vegetación, ya parece indicar la vocación dúplice de sus gentes


Ya en el escudo del pueblo en la plaza del ayuntamiento, vemos en el segundo cuartel, de oro,  dos llaves de sable, puestas en faja, una sobre otra, que reflejan un poco la dualidad del municipio


Dos son los barrios históricos principales, dos fueron las parroquias románicas que flanquean la estructura urbana original de una localidad tan pequeña, y dos son los actuales núcleos de población; el de arriba, con la población más veterana y más históricamente vinculada a la localidad, y el de abajo, más nuevo y en el que se concentran mayoritariamente los jóvenes y los profesionales que le están dando nueva vida. Igualmente dos, el obispado y la Casa de los Bardaixí, fueron los señores históricos de estas tierras


Iglesia de San Pedro Apóstol, de planta rectangular de una nave. El pueblo cuenta con el lujo de poseer dos iglesias románicas. Cada una de ellas fue en su momento el centro de sus barrios. Parte de su interés radica en ser una muestra de la hibridación de las pervivencias lombardas y de las novedades jaquesas que se produjo en el valle de Benasque en el s. XII



A los pies, la espadaña doble muestra la buena fábrica de sillares y el vano del románico avanzado


El ábside de tambor, decorado con friso de arquillos ciegos al estilo lombardo, muestra tres vanos que abren la luz en el cilindro absidal


Iglesia de Santa María, la más antigua de las dos del pueblo, construcción datada en el s. XI, de hechura lombarda, templo de única nave y cabecera con ábside circular y capillas laterales añadidas a modo de crucero


El acceso se realiza por un camposanto, posiblemente con el objetivo de fomentar el recuerdo y devoción a los difuntos


Se encuentra situada en una zona de fuerte pendiente, por lo que la cabecera ha debido prolongar sus muros por debajo del nivel del resto de la iglesia presentando el ábside dos lesenas unidas por los característicos arquillos ciegos de medio punto de tradición lombarda. Bajo los arquillos se aprecia una hilera de huecos cuadrados, a modo de mechinales, destinados a la aireación de la cubierta. También en la cabecera pueden verse tres vanos de medio punto, que corresponderían a la obra original. La capilla sur parece haber sido el basamento de la torre que en su momento no llegó a concluirse


En el s. XVI se concluirían los dos tramos superiores de la torre sobre la capilla citada, se abriría la capilla norte y se construiría el pórtico y la actual portada


La portada, que abre bajo porche a los pies del muro sur


Contrapesas del reloj de la torre componentes esenciales en los relojes antiguos de torre. Su función principal es proporcionar la energía necesaria a los engranajes para que el reloj funcione


Hace girar un tambor que está conectado al sistema de engranajes y mover las manecillas


Y activar el mecanismo de las campanas para dar las horas. Todo esto te va a llevar a tiempos muy lejanos



 Gorgas de Alba

La ruta más bonita de Benasque es subjetiva, pero una de las más populares y espectaculares es la ruta de las Gorgas de Alba una ruta circular fácil y con cascadas impresionantes


Esta ruta circular hasta las Gorgas del Alba transita por el Parque Natural de Posets-Maladeta, un espacio protegido donde se localizan más de 60 picos que superan los 3.000 m de altitud


Los primeros pasos de la ruta discurren entre pequeños pastos rodeados de bojes que pronto dan paso a una zona rocosa


A lo largo del recorrido encontraremos paneles temáticos que nos ayudarán a identificar las distintas especies de árboles y arbustos que crecen aquí


Después del sendero botánico que se adentra por el bosque, es el río el protagonista


A pesar de la frondosidad del bosque, el sonido del agua nos hace ir descubriendo innumerables cascadas


Ya en este tramo el Ésera se muestra en toda su exuberancia


Superpuestas cascadas entre  abetos y pinos


Estamos en el Pirineo arbóreo más salvaje


Otras escorrentías que suman caudal obligan a poner puentes para salvar la senda


Ya en mitad del recorrido cruzamos el barranco de Aigües Pases


E iniciamos la vuelta, esta vez por la margen derecha del río


Y alcanzamos las Gorgas de Alba, que podremos contemplar desde distintos miradores dispuestos para ello


El agua cae entre formaciones rocosas rodeadas de vegetación exuberante, creando un precioso ambiente


Una serie de saltos de agua espectaculares y pozas que se forman sobre el río


Las Gorgas del Alba son un auténtico espectáculo natural


Hay miradores estratégicos desde donde se pueden contemplar las cascadas en todo su esplendor


A partir de aquí continuamos el descenso hacia el punto de partida. El sendero discurre por una zona donde predominan los abetos y pinos y, pronto, alcanza el aparcamiento de donde hemos salido


Chia

El núcleo principal de Chía se sitúa a 1223 metros de altitud, lo que lo convierte en uno de los pueblos habitados a mayor altura de Aragón


Iglesia de San Vicente. Edificio con planta de cruz latina, que consta de una nave con cuatro capillas laterales, un crucero y cabecera recta, a la que se adosa una sacristía en cada lado, así como un campanario de planta cuadrada. Está construida en mampostería


La puerta abre en el muro sur, hacia los pies. Es en arco de medio punto, surmontado por otro similar de construcción reciente en el que apea el pórtico; entre ambos, un pequeño crismón de procedencia desconocida. Está precedida por un pórtico de planta aproximadamente cuadrada, realizado en sillares, abierto al frente por arco de medio punto y cubierto por cañón


Ermita de San Martín, Se distingue la parte románica en la alineación del sillarejo original, de piedra más pequeña e irregular. En el exterior destaca la parte central del ábside


La zona del ábside está rematada por cornisa biselada de piedra sostenida por canes del mismo material y tiene un estrecho vano de medio punto correspondiente a una ventana de doble derrame


Mirador de La Serreta y Sierra de Chía: Esta cordillera rocosa es uno de los elementos más representativos del municipio. Ofrece vistas panorámicas impresionantes del valle del río Ésera


Para los visitantes que exploran el Valle de Benasque, Chía es una parada interesante, ya que ofrece una perspectiva diferente y elevados miradores naturales


La Sierra de Chía, una de las elevaciones más representativas de la zona, proporciona un escenario natural impresionante para practicar senderismo y otras actividades al aire libre


Forau de Aiguallut

Este sumidero de Aiguallut es un capricho de la naturaleza, un sistema kárstico en la cabecera del río Ésera, a unos 2074 m de altitud y cercano al pico Aneto


La excusión al Forau es un recorrido casi obligado en el valle de Benasque. Dejar el coche en el parking público de Llanos del Hospital. En el mismo parking, se puede coger un autobús que te lleva a La Besurta, salida recomendada, y te ahorra un buen trayecto


Un recorrido impresionantemente bello con un desnivel de apenas 200m. Esta señalizado como recorrido circular o bien si lo quieres acortar volver por el mismo sitio


Es un recorrido fácil, que se puede hacer con niños en poco más de dos horas entre la ida y la vuelta


Ya por el camino nos encontramos alguna cascada a mano derecha tras hacer una pequeña subida


Escorrentías y riachuelos que desembocan en los barrancos de Sallerillo, Barrancs y Escaleta. Las aguas de todos estos barrancos se abren como un gran abanico que embellecen la ruta


En plenas entrañas del Pirineo. Disfrutar del precioso paisaje alpino, con el universo pétreo y glaciar del macizo de la Maladeta


Torrente que baja de los Ibones de Villamuerta


A lo largo del camino podemos oír y ver a las marmotas, observar la abundante flora y con un poco de suerte ver sarrios


Cabaña de Aiguallut


Mirador del Forau. Una gran sorpresa para quien lo ve por primera vez. Se trata de una especie de sumidero, de unos 70 metros de diámetro y 40 de profundidad


En el que el agua procedente de los glaciares del Aneto y la Maladeta desaparece bajo tierra a más de 2.000 m. de altitud


Durante años se desconocía a dónde iban a parar estas aguas, hasta que en 1931 se confirmó que circulan subterráneamente durante cuatro kilómetros hasta salir de nuevo a la superficie en el valle de Arán, en la zona conocida como Uelhs deth Joeu, a 1.658 m. de altitud


De esta forma, unas aguas que debían desembocar, a través del río Ésera, en el Mediterráneo; terminan desembocando en el Atlántico, a través del cauce del río Garona. Lo dicho, todo un capricho de la naturaleza


Cascada de Aigualluts. Al fondo, la inclinada cima del Pico Tuca y a su derecha medio tapado por la nube baja el Aneto


Tras la cascada de Aigualluts, nos encontramos con una amplia explanada por donde discurren las aguas del glaciar del Aneto y Maladeta


Cerler

El pueblo más alto del Pirineo Aragonés, sus 1.540 m. sobre el nivel del mar, le confieren una personalidad especial


El origen de Cerler, está documentado en el s. IX pero poco se había hablado de él antes de la década de 1970, cuando no era más que un conjunto de casas apiñadas de difícil acceso


Su antiguo núcleo histórico, perfectamente conservado, sobrevive al desarrollo que ha habido a su alrededor motivado por el gran auge que han tenido en la zona las actividades de invierno que se desarrollan su famosa estación de esquí


Núcleo antiguo en el que vamos a centrar nuestra visita


Y disfrutar recorriendo unos rincones mágicos para la imaginación


La calle Obispo es la principal, atraviesa el pueblo desde la entrada hasta la plaza Mayor con otras varias que confluyen en ella


El casco antiguo de Cerler se levanta alrededor de la parroquia de San Lorenzo y está hecho a base de forja, piedra, madera y pizarra



Cuenta con numerosas casas nobles del s. XVI y con algunas construcciones de épocas anteriores


Varios antiguos casones, destacan y componen el itinerario obligado que repasa la austeridad formal de la arquitectura popular de la zona


Probablemente el edificio más antiguo de Cerler es Casa Cornel, antigua residencia de Pedro Cornell, Obispo de Tarazona en el s. XV


Los Cornel, una estirpe centenaria del valle en la que ha habido desde hidalgos hasta obispos, militares y algún ministro


La casa conserva la casa-patio como ejemplo casi paradigmático de planta baja protegida por un pórtico abierto al patio descubierto del interior


El pueblo, encaramado sobre el valle de Benasque, tiene vistas espectaculares a la mayor concentración de tres miles de la cordillera pirenaica


Iglesia de San Lorenzo, edificio, de mampostería y cantos rodados en hiladas irregulares, de nave rectangular con cabecera semicircular. La torre va montada sobre la capilla que hace de sacristía y tiene el acceso con puerta en alto por el exterior


La puerta de la iglesia abre en arco de medio punto moldurado con dos toscos baquetones


A la derecha de la puerta hay grabada una cruz templaria


Aunque muchos archivos de su historia, se perdieron durante la Guerra Civil, el trazado urbano y las edificaciones conservadas cuentan la historia de un pueblo resiliente


A pesar del auge turístico, el casco antiguo mantiene una serenidad que invita al paseo y la contemplación


Si te gusta la autenticidad, tradición y vistas espectaculares. Si te gusta perderte en rincones con alma, Cerler te va a encantar


1 comentario:

  1. Un valle que no solo posee belleza natural a raudales también sus pueblos merecen ser recorridos con calma y disfrutando de cada una de sus calles. Yo tampoco me hubiera fijado en el casco nuevo de Cerler.

    Saludos.

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