Calatayud - Bílbilis, ciudad española de la provincia de Zaragoza con infinidad de atractivos para ser visitada
Muestra orgullosa sus huellas mudéjares, Patrimonio de la Humanidad
La cuarta ciudad de Aragón, después de las 3 capitales de provincia, centro de una rica huerta, posee una situación privilegiada, ya apreciada desde la época prerrománica por todas las culturas que han pasado por aquí
Una de las puertas conservada de la ciudad es la puerta de Zaragoza, antes llamada de Somajas o Somalías, da acceso al vía que se dirige a Zaragoza ...

... Puerta de un arco, flaqueada en origen por dos torreones hoy transformados en viviendas, ofrece un aspecto pintoresco que y hay que visitar por su emplazamiento próximo a la colegiata del Santo Sepulcro
Colegiata del Santo Sepulcro. La iglesia está construida casi totalmente en ladrillo, excepto el basamento y las portadas de sillería. La fachada principal es muy severa. En el primer cuerpo se abren tres puertas que dan acceso a cada una de las naves. La central más alta, tiene en el tímpano un relieve en piedra caliza que representa el Entierro de Cristo. Las laterales se rematan por la cruz patriarcal
Dos torres flanquean la fachada, constan de tres cuerpos de planta cuadrada y un remate octogonal con chapitel cónico de pizarra
En el interior vemos un monumental templo de tres naves, más amplia la central, crucero no resaltado en planta y un profundo presbiterio que sirve para albergar el coro. La separación de las naves se efectúa mediante pilares de orden toscano que sostienen arcos de medio punto
En el presbiterio se levanta un baldaquino construido a medidos del s. XVIII por el escultor bilbilitano Félix Malo. Constituye una estructura plenamente barroca realizada en mármoles y madera dorada
La imagen de cristo yaciente está flanqueada por las tallas de José de Arimatea y Nicodemo, el conjunto está coronado por una imagen de Cristo resucitado y dos ángeles con el sudario y la lápida
El crucero se cubre con una gran cúpula sobre pechinas, con tambor y linterna. En el tambor se abren ocho ventanas y ocho hornacinas con esculturas de ángeles con los atributos de la pasión. En las pechinas la cruz del santo sepulcro
Las naves se cubren con bóveda de lunetos la central y de arista las laterales
Las vidrieras. La basílica cuenta con una importante colección de treinta y cuatro vidrieras realizadas en el s. XIX. Dieciséis "ornamentales", de los vanos de la linterna y tambor de la cúpula, con representaciones geométricas y las cruces de la Orden del Santo Sepulcro
Otras representan a personajes de forma individual, como los ángeles que se encuentran en las ventanas de la nave central
Mesón de la Dolores. el edificio civil noble más antiguo que se conserva en Calatayud. En su origen es un palacio aragonés renacentista de finales del s. XV. Perteneció al Marqués de Ayerbe. Consta de tres plantas y en la parte superior podemos ver una galería aragonesa de arcos apuntados
Pasando el gran portalón adintelado con vigas de madera de entrada, encontramos un gran patio empedrado y las escaleras que llevan a los pisos superiores, patio al aire libre con pozo y donde podemos apreciar las balconadas de los pisos altos
Hoy aloja un hotel de tres estrellas. La bodega, espacio de origen medieval, ha sido reservado como sala de reuniones, conferencias y comedor
El edificio consta de una serie dependencias singulares, como consecuencia de la carga simbólica que el personaje de la Dolores conlleva. Destaca entre ellas el Museo, que situado en las antiguas caballerizas
Describiendo la historia y vida de la Dolores, la leyenda de "La Dolores", que se popularizó a través de la copla, la ópera de Bretón, el pasodoble "Si vas a Calatayud..."; y obras teatrales como "La Dolores". Además de poetas bilbilitanos y joteros de la Comarca y de Calatayud
Colegiata de Santa María la Mayor. combina en su construcción elementos mudéjares, renacentistas y barrocos, resultado de una dilatada historia que se remonta a los años de la Reconquista de la ciudad por Alfonso I. Su monumental portada-retablo renacentista tampoco te dejará indiferente
Por su ábside y su torre de planta octogonal está considerada una de las obras arquitectónicas más importantes del arte mudéjar aragonés, declarado por la UNESCO Patrimonio Mundial
Impresionante torre de más de 70 m. es el principal elemento identificativo del perfil de Calatayud. Desde lejos se ve su mitad superior, que sobre sale entre los tejados, pero para verla entera hay que colocarse en su base, ya que dentro del casco antiguo la estrechez de las calles y la densa edificación no permiten buenas perspectivas
Casa de las Salamandras. Este edificio fue originalmente un palacio aragonés renacentista, conocido como la antigua Posada de San Antón
Antiguo colegio de la Compañía de Jesús se encuentra situado al lado de la iglesia de San Juan el Real ...
Patio de esta construcción barroca del s. XVI. Actualmente es la sede de la UNED
Iglesia de San Juan El Real. Fachada realizada en ladrillo sobre zócalo de sillería, como el resto del templo, dividida en dos cuerpos rematados en su eje central por un frontón curvo y otro triangular. Además, las cornisas y los pináculos con remates de bolas y labrados en piedra caliza blanca, contrastan cromáticamente con el conjunto de planos resaltados de ladrillo rojo
La puerta de acceso procede de un templo anterior, "San Salvador", dadas sus características renacentistas. Consta de dos columnas abalaustradas, de orden jónico que apoya sobre el basamento y una hornacina con una estatua de San Juan sobre el dintel que las cierra
Templo de estilo Barroco-Jesuítico de planta en cruz latina y capillas en los contrafuertes comunicadas entre sí, sobre las que descansa una tribuna abierta a la Nave central por medio de ventanas con dos arcos de medio punto separados por un Parteluz
El presbiterio es de cabecera recta y se cubre con una bóveda a modo de gran concha o venera, al estilo francés. El retablo del Altar es de manufactura bilbilitana hecho aquí, como otros muchos que fueron cubriendo las iglesias de todo Aragón
El crucero se cierra con cúpula de linterna, sobre pechinas, que están decoradas con pinturas al óleo sobre lienzo pintadas por Francisco de Goya en 1766
A los pies, vemos un magnífico órgano, en una espléndida caja barroca de considerables dimensiones y rica talla del s. XVIII
La torre se edificaría más tarde, en 1774, al estilo mudéjar que imperaba en la ciudad. Se halla situada en la cabecera, al este del presbiterio. Esta puerta de acceso es adintelada y flanqueada por dos columnas elevadas que sujetan un arco de medio punto. Encima de la puerta se encuentra el escudo de la Compañía de Jesús y una hornacina con la imagen del santo titular
Se compone de tres cuerpos; el primero de planta cuadrada de paredes lisas, sin ornamentación alguna; el segundo ligeramente ochavado, con decoración de pilastras enmarcando vanos rematados por frontones curvos; el tercero de campanas, tiene decoración de ladrillo. Remata la torre un chapitel bulboso
Seminario de Nobles - Juzgados. Edificio del s. XVIII. Después de la marcha de la Compañía de Jesús se trasladó aquí el Hospital Municipal, que estaba entre las iglesias de Santa María y San Andrés. Actualmente este edificio alberga el Juzgado de Calatayud
Palacio de Sesé. Uno de los más relevantes de la ciudad, del s. XVI. Fachada en ladrillo de tres alturas con zócalo de sillería y destacando el tercer nivel que corresponde a la galería de arcos de medio punto y alero
Plaza de España o del Mercado. Antigua Lonja y antiguo ayuntamiento, edificio renacentista, del s. XVI, hoy oficina de turismo
Escultura recordatorio a los vendedores del mercado que recuerda que la plaza fue el mercado de toda la Comunidad de Calatayud
Palacio de los Pujadas de Vezlope ó Berospe, con su fachada transformada a fin de convertirlo en un centro de enseñanza. En la actualidad se encuentra en fase de restauración para convertirlo en sede de la oficina delegada del Gobierno de Aragón
Iglesia de San Pedro de los Francos. Reconquistada Calatayud a los musulmanes en el año de 1120, Alfonso I el Batallador fundó un templo bajo la advocación de San Pedro para que sirviese como parroquia a los francos de Bigorra
La portada, a los píes del templo, utiliza como material la piedra sillar, es de tipo gótico levantino, abocinada y formada por seis finos baquetones. Adosados a las jambas y bajo doselete, las esculturas de San Pedro y San Pablo y en el tímpano Cristo en Majestad acompañado por la Virgen y San Juan
Iglesia es de estilo gótico, del año 1300, posee una planta de tres naves, casi de la misma altura, con crucero no acusado en planta y con triple ábside poligonal en el testero. La nave central, es de casi doble anchura que las laterales, hallándose separada de éstas por columnas fasciculadas
Palacio del Barón de Warsage, s. XIX. Ocupa el solar del antiguo Hospital de Nuestra Señora del Clero. Tiene una portada de estilo neoclásico entre columnas de orden toscano. Sobre el balcón principal se encuentra el blasón que quedó sin labrar
El río de Calatayud es el Jiloca, afluente del río Jalón. Su curso transcurre por las provincias de Teruel y Zaragoza. un río muy irregular con un estiaje muy marcado y caudal máximo en otoño y primavera
Museo de Calatayud, ubicado en el antiguo Convento de las Carmelitas, edificio del s. XVII
Aquí se puede ver parte de la Colección Arqueológica propiedad del Centro de Estudios Bilbilitanos y de los fondos arqueológicos procedentes de las excavaciones del yacimiento romano de Bílbilis
Convento de las Carmelitas Descalzas, edificio que aloja el museo de Semana Santa, que exhibe pasos procesionales y otras piezas religiosas
Fuente de los Ocho Caños. De la ideología urbanística del Renacimiento, época de apogeo en el embellecimiento y racionalización urbana, Calatayud decidió traer aguas desde los prados del término de Cifuentes y levantar esta fuente monumental
Puerta de Terrer, antes denominada puerta del Matador, es una construcción renacentista, posterior al año 1580 como se deduce de sus blasones. Consta de dos torreones de frente semicilíndrico, construidos en ladrillo, y rematados en tejadillos cónicos con aguja. Hoy es la sede del Centro de Estudios Bilbilitanos
Santuario de Nuestra Señora de la Peña se levanta en un promontorio donde se asentaba uno de los cinco castillos del recinto fortificado islámico del que solo queda la planta y algunas cámaras excavadas en la roca. Sobre sus restos se edificó la iglesia
Durante la guerra de la Independencia, debido a su situación estratégica, los franceses se acuartelan en el Santuario y lo fortifican. Cuando lo abandonan después de la derrota, está en estado ruinoso y se procede de nuevo a su restauración, acabando las obras en 1826
El templo, iglesia-fortaleza mudéjar de una nave con cinco tramos abovedados de cañón con lunetos, fábrica que encierra los restos de la construcción mudéjar
La central es el actual camarín, donde destacan las yeserías. El cerramiento es a base de bóvedas de crucería simple
A su costado está la escultura del Sagrado Corazón de Calatayud que se inauguró en el cerro del Santuario de Nuestra Señora la Virgen de la Peña, patrona de la ciudad bilbilitana
Y desde donde hay unas vistas excelentes de la ciudad
El monumento se esculpió con motivo de la consagración de la ciudad al Corazón de Jesús. Se realizó en piedra de sillería y se eligió el lugar en el que se encuentra porque era un terreno cedido por la Esclavitud de Nuestra Señora de la Peña
Castillo de la Peña. Sobre un cerro y en el sureste, se levantaba este Castillo del que solo queda la planta y algunas cámaras excavadas en la roca. Y sobre el que se edificó la iglesia de la Virgen de la Peña. Entre este castillo, el de Doña Martina y la Torre Mocha, se ubicaba el barrio judío
La presencia judía en Calatayud es simultánea al periodo de dominación musulmán, aunque no se configura como aljama, es decir, no adquiere estructura jurídica hasta fines del S.XI. La mayor parte de datos conservados son posteriores a la conquista de Calatayud en 1120 por Alfonso I el Batallador
Durante la Alta y Plena Edad Media los monarcas aragoneses tratan de atraer repobladores, ya sean cristianos, mudéjares o judíos, para tratar de consolidar los territorios conquistados. De ahí que el fuero se muestre muy respetuoso con la comunidad judía, permitiéndoles seguir habitando en el mismo barrio, situado en la parte alta y fortificada de la ciudad
La red viaria presenta un trazado angosto y sinuoso. De las calles principales, (Torremocha, Cuesta de Santa Ana ...), arrancan otras secundarias por las que se accede a calles sin salida que su introducen en las manzanas sirviendo de acceso a las viviendas, más de una, a través de un "patio de vecindad"
Sinagoga Mayor. La fábrica exterior presenta dos partes yuxtapuestas, que no forman una unidad constructiva. En la parte central un muro de sillares de piedra caliza blanca con dos puertas pequeñas, con jambas y arcos apuntados de ladrillo, pertenecen a la antigua Sinagoga
Ermita de la Virgen de Consolación, Llamada también Sinagoga Mayor, en algunos escritos aparece como Casa Principal de la Judería. Su licencia está datada el 20 de Septiembre de 1368. Fue utilizada para celebrar en ella reuniones plenarias y también como centro de enseñanza. La actual puerta de entrada, con un arco de medio punto de ladrillo sobre las pequeñas molduras de las impostas. Sobre la clave, y al exterior, una Virgen de la Consolación es la única referencia a la titular de la iglesia, ya que en el interior no existe ninguna
Castillo de Doña Martina. Situado en el centro de la medina, es el mayor de todos, con una planta alargada de 140 metros. Flanqueado al norte y al sur por los barrancos de la Rúa y de las Pozas
Centro de Interpretación de la Judería Bilbilitana
Se trata de un espacio instalado en una antigua bodega medieval que se descubría durante unas obras que se realizaban en la Calle Consolación Alto. En este espacio se puede conocer numerosa información de la Judería de Calatayud
Recinto de la Torre Mocha. Se sitúa sobre un cerro a poniente, entre los dos barrancos, es un recinto cerrado con una alta torre octogonal en el centro, que separa el Castillo de Doña Martina de la zona urbana habitada
Hoy conquistado por las cigüeñas que anidan en sus muros
Iglesia de San Andrés, Se cree que es una de las parroquias fundadas tras la reconquista por Alfonso I el Batallador
Documentación conservada de los ss. medievales hace referencia a las rivalidades con Santa María, alegando mayor antigüedad. Entre estas rivalidades figura un pleito de 1335 entre los cabildos de Santa María y San Andrés acerca del desagüe de las aguas de lluvia procedentes de la judería que bajaban por la actual cuesta de Santa Ana
La torre. El primer cuerpo de la torre corresponde al tipo de torre mudéjar constituida por dos torres, la exterior de mucho mayor grueso de muro envolviendo a otra interior estrechándose en altura, típico en las torres mudéjares aragonesas de época tardía
Iglesia de tres naves, con crucero no acusado en planta, cuyo testero inicial ha desaparecido con la ampliación del s. XVI. Las tres naves de distinta altura, van cubiertas con bóvedas de crucería simple de nervios diagonales
El retablo mayor es de escultura, en cuyo banco hay dos relieves con San Marcos y San Lucas mientras que los otros dos Evangelistas han sido sustituidos por dos santos
Puerta de Soria. El "barrio árabe" de Calatayud no tiene un nombre específico, pero está referido al Barrio de la Puerta de Soria, que ocupa el núcleo originario de la ciudad, con el Castillo de Ayub como su centro
Arco de San Miguel servía como una de las puertas principales de la ciudad, dividiendo el barrio cristiano del barrio árabe o mozárabe
El trazado de sus calles, las viviendas excavadas en el terreno y la presencia de elementos como corrales y bodegas son herencias directas del urbanismo islámico
En el dintel, se muestra una inscripción antigua en lo que parece ser escritura árabe. Para traducir esta inscripción, sería necesario contar con un experto en epigrafía árabe o en historia islámica
Aunque la presencia musulmana terminó en 1120, su legado perduró y está presente en este barrio histórico, uno de los que mejor conserva la impronta de los orígenes árabes de Calatayud
Se pueden observar el entramado de calles y plazas, viviendas construidas en el terreno, y restos de las fortificaciones, como la del Reloj y la de Ayyub
Castillo del Reloj. De planta alargada, con recintos alto y bajo. Entre sus restos hay cámaras y escaleras excavadas en la roca de yeso. El Reloj Tonto es uno de los elementos identificativos de la localidad. Aunque, no es un reloj. No consta de maquinaria alguna que mida el tiempo. Pero sí de campanas que de antiguo daba las horas. Se supone que de ahí le viene lo de Reloj Tonto
Castillo de Ayyub. El nombre original de Calatayud era Qal´at Ayyub ("castillo o fortaleza de Ayyub")
Este castillo, así pues, no solo es un testimonio de la arquitectura militar islámica, sino también un símbolo del origen, nombre y evolución de la ciudad
De tal manera que tu visita será una inmersión en siglos de historia
Aunque este castillo es el mejor conservado del conjunto de Calatayud, algunas partes están en proceso de ruina progresiva, especialmente los muros y torreones más antiguos
Destacan cuatro torreones: Este y oeste de planta octogonal, con dos pisos abovedados y falsas cúpulas. Central semioctogonal, bien conservado y de gran altura. Sur cuadrado, el más deteriorado
Consta de dos recintos. El alto, más antiguo, orientado hacia la ciudad
El bajo, una ampliación hacia el norte con planta típicamente musulmana
Fue construido en el s. IX por Ayyub ben Habib al Lajmi, quien también fundó Calatayud en el año 7162. Durante el emirato de Córdoba, formaba parte de la Marca Superior, una zona fronteriza con centro en Zaragoza
En el año 937, Abderramán III lo tomó como parte de la rebelión de los tuyibíes. En 1120, Alfonso I de Aragón lo conquistó durante la Reconquista
El conjunto conserva adarves, puertas con arcos rebajados y bóvedas de cañón ligeramente apuntadas que cierran espacios que probablemente actuaron como albacaras
Los accesos permiten vistas panorámicas sobre la ciudad y tramos de muralla conectados ofrecen recorridos interesantes para el visitante
Calatayud a sus pies
Torre Albarrana. Localizada en el poniente del Castillo Mayor, está considerada como el ejemplo más antiguo de este tipo de construcción en Al-Ándalus. Tiene dos estancias, la superior con bóveda de cañón. El acceso a la terraza es por escalera intramural en "L"
Bílbilis
Bílbilis es un yacimiento arqueológico situado en las inmediaciones de Huérmeda, barrio pedáneo de Calatayud, aguas abajo del río Jalón, poco antes de su confluencia con el Ribota. El nombre de Bílbilis es el vocablo indígena dado por los celtíberos de la tribu de los lusones (11-1 a.C.), con el que se conoce el lugar desde que hay referencias escritas, gracias a los eruditos e historiadores que se ocuparon de él
En el s. I a.C. recibió un aporte de colonos itálicos que aparecen en las monedas acuñadas en la ciudad con el nombre de Bílbilis Itálica. A finales de ese s. 1 a.C., bajo el gobierno de Octavio Cesar Augusto, Bílbilis ascendió a municipio de ciudadanos romanos, lo que le otorgaba privilegios sobre las demás localidades de la zona, además de funciones administrativas acordes con su categoría
La pequeña ciudad indígena se transformó en una ciudad embellecida por varios conjuntos monumentales, entre los que destacan: el foro, con una plaza porticada, sótanos de almacenaje y taller de acuñación de moneda propia con el nombre de la ciudad; templos; edificio de la curia (equivalente a nuestros ayuntamientos); basílica (donde se administraba justicia); y, un espléndido teatro ornamentado con ricos mármoles de importación, pinturas y grupos escultóricos representando a la familia imperial. Bílbilis fue una ciudad amurallada que dispuso de una red de abastecimiento de aguas y saneamiento, unas termas públicas y un caserío distribuido en manzanas con una pintoresca fisonomía que se adaptaba al terreno, tal y como ya señaló su ciudadano más conocido, el poeta Marco Valerio Marcial
La ciudad fue próspera durante el s. I y II d.C., pero luego, por dificultades económicas, crisis agrícola, sequías y problemas con la infraestructura de abastecimiento de agua, sus habitantes la fueron abandonando poco a poco para trasladarse a la actual Calatayud, hasta quedar semiabandonada en el s. V d.C., según relatan algunos historiadores de la época. En la Edad Media, Bílbilis era ya un despoblado sin futuro. Sin embargo, en la actualidad Bílbilis es un lugar de visita obligada para todo aquel que quiera conocer la grandeza de la cultura romana que nos precedió y de la que somos deudores. Impresiona su paisaje agreste para recorrer pausadamente con la ayuda de la información que se facilita en sus puntos más destacados.
La llegada a este punto merece una pequeña pausa para contemplar el paisaje circundante desde la altura. Vemos en la distancia Calatayud y entramos en el corazón de la ciudad con sus monumentos principales, hoy muy deteriorados por el abandono y el aprovechamiento de sus restos en la construcción de Calatayud desde la Antigüedad Tardía hasta la Edad Media
Desde aquí podemos observar, hacia el norte, el cerro de Bámbola, que con sus 711 m de altura constituyen la cima de la ciudad, las huellas de las antiguas canteras y las terrazas que albergaron los barrios altos , hacia las termas. Al este tenemos el cerro de San Paterno, de 704 m de altura , presidido por la ermita dedicada a dicha advocación, construida sobre una antigua cisterna romana
En un lateral, encontramos la potente mole del teatro que aprovecha una vaguada natural y el foro con su templo, los pórticos y la curia o antiguo "ayuntamiento". Es importante destacar que Bílbilis, además de ser una ciudad concebida de manera funcional, fue también diseñada como un faro de romanidad, para ser contemplada desde lejos y mostrar así, a las poblaciones vecinas, la importancia y las ventajas de la civilización y administración romanas
En la actualidad, la pérdida de los edificios nos permite valorar mejor la importancia del enclave geográfico de la ciudad, su valor estratégico en la Antigüedad, dominando un importante cruce de caminos que recorrían los valles de los ríos Jalón, Jiloca y Ribota
En la explanada ubicada en la parte posterior del foro y del teatro se encontraban los comercios y algunos talleres de productos de hueso o incluso de fabricación de placas de vidrio para ventanas. Desde esta zona central de la ciudad se distribuía la circulación hacia los diferentes barrios. Hasta el comienzo de las excavaciones, en 1971, toda esta zona del yacimiento estuvo cubierta de viñedos. Parte de las laderas laterales eran antiguas terrazas cultivadas de cereal pobre, cebada y centeno, que fueron abandonadas por su escaso rendimiento y sustituidas por plantaciones de almendros
El foro bilbilitano se edifica arrasando una zona de viviendas de época cesariana, y tal vez otros monumentos anteriores, de las que se hallaron restos de estructuras, materiales varios y restos pictóricos. Se planifica de una sola vez la construcción de un gran centro monumental compuesto por forum con plaza (48,64 m. de longitud por 44,88 m. de anchura, incluyendo en estas dimensiones sus pórticos laterales), templo dominándola y dos pórticos, convirtiéndose uno de los lados del pórtico en basílica. En el opuesto un gran basamento al final del pórtico puede suponer la existencia de una curia. La comunicación de la plaza con el templo, seguramente exástilo, se realiza mediante una monumental escalera que salva el pórtico inferior sobre la misma plaza
Entrada al Criptoforo. En Bílbilis, la ubicación del foro se sitúa en un sitio topográficamente no muy idóneo. Desde el punto de vista práctico existen lugares en el urbanismo más adecuados para construir el foro y que requieren de un menor esfuerzo constructivo. Sin embargo, aquí prima la visibilidad y la creación de un hito principal que resalta en la topografía urbana donde sobresale la monumentalidad y visión de conjunto. Concepto de ubicación en un punto elevado y que resalta en el paisaje
En el lado oriental del foro de Bílbilis se construyó un criptopórtico que salva la elevada pendiente del este del conjunto
El foro de BÍlbilis presenta una estructura de pórticos articulada en dos alturas, una a nivel de la plaza y otra a nivel del templo. Para salvar las diferencias de cota existentes se construyeron criptopórticos con doble función de circulación y de salvar la diferencia de altura
También criptopórticos que sostienen la basílica jurídica de la ciudad, por lo que se combinan ambos tipos de edificios en la planta superior
El criptopórtico que lo sostenía presentaba una altura máxima de unos 4,6 m. en base a la diferencia de altura entre la cota de la plaza y el suelo de este pórtico
Las excavaciones realizadas mostraron la existencia de viviendas y una calle comercial que ascendía hacia las termas. Esta fue una zona privilegiada por la calidad de sus casas ricamente ornamentadas y su orientación al mediodía. En una de las viviendas excavadas se descubrieron dos lagares y algunas vasijas de almacenaje, lo que indica que se trataba de una instalación para elaborar vino
En esta rica vivienda (domus del larario) se halló una entrada presidida por un larario o altar dedicado a los antepasados ricamente ornamentada con pinturas que conserva el Museo de Calatayud O, así como una sala calefactada por el suelo con hipocaustum. La aparición de un enterramiento infantil bajo el pavimento en una urna cineraria nos muestra la pietas (piedad) de sus moradores, seguramente de origen itálico.
En la zona alta de la ciudad, al abrigo del cerro Bámbola, vemos el edificio de las termas y el barrio que lo rodea. Dos circunstancias hacían de este barrio una zona privilegiada: por un lado, disponía de uno de los edificios singulares, los baños públicos; y por otro, estaba bien orientado al mediodía, resguardado de los vientos fríos que llegaban del norte y del oeste
La fachada de las termas se abría a una calle porticada con aceras de piedra, pavimento de tierra apisonada y varias casas de hasta tres alturas que pertenecían a bilbilitanos acomodados
Las termas o baños públicos sorprenden por su reducido tamaño en comparación con las de otros lugares, pero llevar agua a Bílbilis no era sencillo, y éstas la consumían en gran cantidad. Estuvieron rodeadas de tres cisternas que aseguraron un suministro suficiente, pero no abundante. Es un edificio de recorrido simple, por lo que tuvieron que alternar su uso en horarios o días diferentes hombres y mujeres ya que la convivencia única no estaba permitida
Dispusieron de las estancias habituales, además de espacios para clientes y otros reservados para los trabajadores que las hacían funcionar, fueran o no esclavos. Para los clientes, una entrada con el vestuario (apodyterivm), dotado de hornacinas para dejar ropa y pertenencias. De allí se pasaba a una estancia con una pequeña piscina de agua fría (frigidarivm), seguida de otra templada (tepidarivm) ® y finalmente la sala calefactada por medio de una cámara de calor que recorría bajo el suelo y paredes (caldarivm), en uno de cuyos extremos había una gran "bañera" revestida de mosaico, con una masa de escoria de hierro bajo ella para conservar el calor que provenía de un horno (praefvrnivm) O donde se alimentaba el fuego constantemente, para asegurar la temperatura y calentar también un depósito de bronce que contenía agua que pasaba a la "bañera"
En un lateral de esta sala caliente se sitúa una estancia cuadrada, en la que se disponían bancos portátiles a los lados y en el centro se encontraba el vaso de la fuente de piedra (labrum) con un surtidor para refrescarse. Todas las salas estuvieron decoradas con mosaicos hoy desaparecidos a excepción de algunos fragmentos que conserva el Museo de Calatayud. Elementos complementarios de las termas fueron los canales de desagüe, unas letrinas en la entrada y una sala circular, que fue amortizada por la escalinata de acceso al edificio en alguna de sus varias reformas
El barrio se construyó aprovechando una terraza del terreno que se sujetó mediante gruesos muros de piedra local. El acceso a las viviendas se encontraba en la fachada a la calle principal, mientras que el servicio utilizaba la entrada por la parte superior, en una calle paralela secundaria
Las viviendas, por lo general, disponían de espacios comerciales en la planta baja, entre ellos una taberna (cavpona), mientras que en los dos pisos superiores se distribuían las estancias de sus propietarios, cuyos suelos estuvieron decorados con mosaicos de opvs signinvm y sus paredes revestidas con pinturas, del IV estilo pompeyano.
Como singularidad, la domvs I, tuvo un baño privado calefactado (balnevm), indicativo del estatus de sus propietarios. Es probable que este baño privado se construyera aprovechando las obras de remodelación de las termas que sabemos sufrieron una ampliación importante que modificó parcialmente su circulación
Este fue un barrio cuyos habitantes gozaban de buenas vistas al centro de la ciudad y a la zona monumental. Posiblemente sus moradores eran acomodados comerciantes que se beneficiaban del tránsito de visitantes y usuarios de las termas
Cisternas en las laderas que rodean el área arqueológica principal
No hay comentarios:
Publicar un comentario