Sádaba - Layana

Sádaba, una de las históricas Cinco Villas aragonesas, un territorio cargado de tesoros artísticos y naturales


Con un indudable sabor medieval


Para describir los perfiles de Sádaba, hay que empezar por el rectilíneo castillo, con los impecables muros dorados de sus siete almenas, que proyectan una imagen de ciudadela


Y seguiríamos por la iglesia, cuya torre hace que nos perdamos entre sus filigranas, una silueta muy elegante


El pueblo se rodea de campos de cereal y ambiente de estepa, lo que acentúa su color a miel


Sin embargo, no hay que dejarse, quizás lo más importante, el sabor a tradición de sus edificios más típicos que, dispuestos sin dejar un solo hueco, apretados uno contra otro, dotan a la villa de un sólido corazón


Calles estrechas y aceras bajas o inexistentes, todo ello en piedra


Con austeros y sobrios caserones que se revisten de dignidad y de porte señorial


Arriba, los sencillos aleros prolongan tejados de pendiente suave y sus tejas árabes amparan estilizadas fachadas, en las que se alternan la dorada arenisca con las manchas blancas del encalado


Abajo, la piedra es empleada toscamente para perfilar sus casas y labrar sus calles


Fuente, construcción del s. XVII de piedra tallada en sillares. Dos columnas sustentan un arco de medio punto cegado, una hornacina con la Virgen con Niño y remata un frontón triangular, que se adorna con el escudo de armas de la villa


Iglesia de Santa María, uno de los más bellos exponentes de la arquitectura gótica en Aragón que sirvió de ejemplo a las construcciones de la Comarca


El templo, de estilo gótico levantino del s. XVI, responde a un modelo de nave única con capillas abiertas entre los contrafuertes y ábside poligonal


La torre, de piedra sillar de tres cuerpos, uno con base cuadrada y dos octogonales. En torno al segundo se dispone una galería protegida por balaustrada. Todo ello se corona con una crestería profusamente engalanada y una aguja en forma piramidal


La puerta principal entre el gótico y el renacentista, presenta seis arcos apuntados que se prolongan en sendas columnillas molduradas separadas por capiteles con decoración vegetal


Rodeando a la iglesia, se encuentra el barrio moro. En Sádaba a todo lo que es antiguo, los vecinos lo llaman "de los moros", si bien es cierto que este entramado de calles tiene origen árabe


Esta zona de intrincadas callejuelas depara sorpresas, una de ellas es un edificio del que sólo resta la fachada, con un pequeño balcón de cuidada forja y decorado al pie con piedra labrada representando un rostro humano, otro de animal y dos cuerpos desnudos. Tan osada imagen podría hacer referencia al uso del edificio, que podría haber sido un prostíbulo en el Medievo


O Piedras talladas de honor y gloria, ahora se han convertido en elementos decorativos


Ayuntamiento, uno de los edificios que por sus valores arquitectónicos contribuyen a dotar a la ciudad de Sádaba de personalidad arquitectónica


Casa del Conde, uno de los mejores ejemplos de arquitectura civil aragonesa que encontraremos, con un bello alero


Otro de los edificios más llamativos es Casa Cortés, convertida en Hospedería


Edificio Colegio Rural Agrupado Los Bañales


Castillo, construido en piedra sillar, un edificio de clara influencia cisterciense, que se erigió en el s. XIII, por Sancho VII de Navarra, y que ha pasado a ser uno de los más representativos de su época en toda España


Un recinto murado de 40 m. de altura con siete torres almenadas de planta rectangular, diferentes entre sí, dispuestas en las cuatro esquinas y en el centro de los muros Norte, Este y Sur


Todo el conjunto rodea un patio de armas donde quedan parte de las instalaciones originales del castillo


Próximo al castillo hay un nevero. Estos antiguos pozos de hielo permitían el almacenamiento y la conservación de nieve para su consumo en la temporada estival


Mausoleo de los Atilios, los sadabeses se refieren a él como el Altar de los moros, pero ni es altar, ni es árabe, es un monumento funerario romano que merece la pena visitar


El mausoleo fue mandado edificar por Atilia Festa en el s. II, para albergar los restos de su abuelo, C. Atilius Quirina, de su padre, L. Atilius Festa y de ella misma, como atestiguan las inscripciones que se conservan en la parte superior del monumento


En el entorno está el paraje natural de Valdelafuén, en el que se encuentra el embalse que lleva su mismo nombre. Construido éste de forma vecinal a finales del s. XIX


Incluido en los humedales de Las Cinco Villas, está clasificado junto con el de Bueta, como zona de especial protección de aves (ZEPA), ya que se pueden ver: ánades, fochas, gallinetas, cucharas, garza real, cigüeña blanca, aguilucho lagunero, garzas y garcetas


La tranquilidad de sus aguas y alrededores lo convierten en un bello paraje de esparcimiento


En su flora cabe destacar una gran variedad de orquídeas, aliagas, esparto, tomillo, romero y juncos


Canal de Bardenas a su paso por Sádaba. 132 km. que traen agua del embalse de la Yesa para regar las Bardenas Reales y la comarca de Cinco Villas


Mausoleo la Sinagoga, un edificio funerario del Bajo Imperio ya que tanto por su planta cruciforme como su aparejo de "opus mixtum" responden al modelo característico del s. IV d.C


La técnica de "opus mixtum" alterna las hiladas de sillarejos con las de ladrillo rojo visibles por las dos caras del muro a lo largo de todo su contorno


Junto a los restos del mausoleo, se sacó a la luz la parte residencial y las dependencias termales de una villa romana con gran riqueza cromática en los mosaicos que la cubrían. El material hallado fue vuelto a soterrar para su conservación


En el entorno próximo está la iglesia de Puylampa. Construida en el s. XII, de estilo cisterciense formó parte en la Edad Media de un conjunto monástico regido por monjes hospitalarios


El nombre evidencia la que fue su función, proviene del latín "Podium Lampadii". La iglesia mantenía siempre una antorcha encendida, que iluminaba a los peregrinos que recorrían la ruta Jacobea de las Cinco Villas para llegar a Santiago de Compostela


La portada en arco de medio punto con seis arquivoltas en degradación decoradas con motivos geométricos. Se apoyan en columnas lisas rematadas por capiteles con decoración vegetal y geométrica


Detalle de un ventanal del ábside


Layana. Esta comarca desde siempre ha sido habitada y sus numerosos pueblos así lo atestiguan y aportan riqueza histórica y monumental. Como ya se aprecia en el perfil de Layana


Este pequeño pueblo de la comarca aragonesa de Las Cinco Villas puede presumir de tener en la parte más alta del mismo una torre medieval que, desde lejos, destaca majestuosa e imponente


La torre, edificación militar del s. XIII de carácter defensivo, guarda en común muchas características con otras similares que se extienden por el norte de la provincia de Zaragoza y Huesca


Iglesia románica de Santo Tomás de Canterbury, s. XII


La fachada oeste está muy alterada por una desproporcionada espadaña trífora y se aprecia en su base restos de una portada cegada


Consta de nave única acabada en ábside de tambor liso, con tres ventanales espillados de los cuales el central está cegado y el norte oculto por la sacristía adosada


Al pasear por sus calles empedradas de aire medieval nos encontraremos con interesantes casonas de piedra


Como la que aloja la casa consistorial


O, bellos rincones como esta fuente, pero además es obligado visitar el lugar arqueológico de los Bañales, próximo a la localidad



En el s. XVI se edificó la ermita de Los Bañales, templo totalmente reformado en el s. XVIII, de nave única, capillas laterales y cabecera recta


Los Bañales es una zona fuertemente romanizada, cuya actividad económica se centraba en la producción y comercio agrícola del cereal principalmente


La parte residencial de la ciudad estaba asentada sobre un poblado prerromano, que podría datar del s. IV a.C., situado en el cerro de "El Pueyo". La zona monumental se encontraba en el llano y es allí donde se localizan el foro, las termas, el acueducto, el templo, además de una serie de calles pavimentadas


Del foro perviven dos monumentales columnas de orden toscano y el basamento de otras que formaban parte del pórtico. También han sido hallados restos de un muro y un graderío en la ladera del Pueyo, que corresponderían al templo


El edificio de las termas, aunque deteriorado por los diferentes usos que ha tenido a lo largo del tiempo, es uno de los que mejor se conserva en Aragón


Sin duda, el monumento más representativo del yacimiento de Los Bañales y posiblemente un elemento inspirador del actual nombre de la zona, relativo a los baños


Se accedía por dos pequeños vestíbulos con bancos, que permitían controlar los turnos de entrada y salida, de estos se pasa a un vestuario en el que se conservan en sus paredes las hornacinas que hacían de guardarropa


Mercado. "Tabernae comerciales"


Viviendas


Exedra. Espacio de culto


Edícula. Templete de la Victoria Imperial


Basílica del foro


Con el fin de abastecer de agua a las termas, al poblado y a las villas, se construyeron una presa, hoy colmatada, y un acueducto


Del acueducto se conservan 32 pilares, aproximadamente la mitad de los que tenía la construcción en origen



Estos están construidos con bloques de piedra montados en seco y aparecen dispuestos en curva


El canal de la parte superior por el que circularía el agua, estaría hecho de madera. La construcción data de un momento posterior a la segunda mitad del s. I d.C



2 comentarios:

  1. Hermoso lugar y hermosas fotografías: ¡muchas gracias por compartirlas!

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  2. Bonitos lugares en los que parece se paro el tiempo.

    Saludos.

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