Tíscar, una pequeña aldea de Quesada, Jaén, donde se combina naturaleza y patrimonio cultural, de recomendada visita
Donde encontraremos la impresionante Cueva del Agua, el Castillo de la Peña Negra y el Santuario de la Virgen de Tiscar
Todo ello ubicado en una zona de increíble belleza paisajística
Grandes pinares e impresionantes moles rocosas te hacen apreciar la grandiosidad del entorno
Varias aldeas muy pequeñas disfrutan de estos parajes. Una de ellas es Tíscar
Tíscar, procede de la lengua bereber y significa paso entre montañas, ha sido habitada desde los íberos y por donde han pasado todas las civilizaciones de España
La Cueva del Agua. Un sendero con un pequeño descenso en el que podemos ir contemplando la típica vegetación mediterránea de la zona
Hasta llegar a un pequeño túnel peatonal de 10 metros de largo y un metro de altura que da acceso a la gruta
Donde el agua del río Tíscar ha labrado la roca del monte Caballo, formando una gruta excepcional
Y una karstificación reflejada en las estalactitas de los abrigos que se abren en la pared
Se observan caprichosas formas de piedra, entre saltos y pozas de agua, con una vegetación rupícola característica y exuberante
Declarada Monumento Natural por la Junta de Andalucía, las formas de sus rocas son un precioso cañón formado a lo largo de los siglos
Acondicionada con escaleras durante el recorrido de más de 80 m. de desnivel y varios miradores que se asoman al precipicio
También es conocida como cueva de la Virgen, representada con una pequeña imagen en un hueco del abrigo frontal. Según la tradición, fue el lugar donde se apareció la virgen en el año 1.319 al reyezuelo de Tíscar Mahomad Abdón
Cuenta la leyenda que, durante la época musulmana, los cristianos tenían gran interés en recuperar este paraje por haber sido escenario de una aparición de la Virgen
Por ello los moros arrojaban su imagen desde la torre a la cerrada del río, pero la imagen volvía a aparecer una y otra vez. Cansados de ello, su jefe, Mahomad Andón, la rompió en pedazos, pero cuando los cristianos conquistaron el castillo misteriosamente la Virgen volvió a aparecer
Aparte leyendas, que aquí las hay para dar y tomar, si te gusta la belleza natural este es un buen sitio. Si no, mira:
Encantadoras cascadas del río Tiscar se precipitan entre rocas sobre pozas, originando un placentero rumor y frescor
En algunos lugares se aprecian exvotos de creyentes de la Virgen
Pilón Azul, río abajo, camino de la Aldea de Belerda el correr del agua forma este idílico rincón
En un enclave puramente serrano y realmente bello se ubica Tíscar
Un conjunto mínimo de casas al cobijo de Peña Negra alrededor del Santuario
Calles normalmente vacías, pero debido a la gran devoción por la Virgen en toda la comarca, se ven inundadas durante la romería de agosto
Un cuidado túnel bajo una edificación da acceso a la pequeña plaza donde se ubica el santuario de Tíscar
En el santuario destacan las puertas de acceso a la iglesia a través del atrio, la sacristía y pequeñas imágenes de terracota de la Virgen y los Evangelistas
También encontraremos varias fuentes
"En la sierra de Quesada
hay un águila gigante,
verdosa, negra y dorada,
siempre las alas abiertas.
Es de piedra y no se cansa.
Pasado Puerto Lorente,
entre las nubes galopa
el caballo de los montes.
Nunca se cansa: es de roca.
En el hondón del barranco
se ve al jinete caído,
que alza los brazos al cielo.
Los brazos son de granito.
Y allí donde nadie sube
hay una virgen risueña
con un río azul en brazos.
Es la Virgen de la Sierra"
Poesía de Antonio Machado en la que se alude a la Virgen de Tíscar
Donde la Virgen risueña quiso quedarse eternamente para gozo de todos sus devotos
Justo arriba, por encima de la aldea, se ubica la atalaya, de difícil y peligroso acceso
Aunque la primera parte de la ascensión esta habilitada con escaleras, a mitad de ascenso hay que pisar la piedra
Es un recinto de reducidas dimensiones, con una pequeña torre del homenaje y los paños de muralla se adosan a las rocas
Situada en su extremo oriental, está construida en tapial con partes de mampuesto
En el centro se alza un gran roquedal, llamado Peña Negra, que posiblemente funcionaba como alcazarejo del castillo
La estructura de acceso y murada es de época andalusí
Y la torre del Homenaje es de época pos-reconquista cristiana
Vistas desde el castillo, llanuras de Guadix y Baza hasta Sierra Nevada
Paredes naturales, posteriores del castillo
Tierras preñadas de agua, montañas pintadas de verde, peñas labradas por el viento, cuevas que abrigan leyendas, senderos que llegan a la Gloria, ríos embriagados de paz
Me encanta este sitio!!! Ya hace tiempo que no voy pero espero hacerlo en breve.
ResponderEliminarBonito reportaje.
Un saludo.
Un lugar que no coincide con es estereotipo que tenemos de Jaén.
ResponderEliminarComo nos dices leyendas cada imagen de la Virgen hay tantas como imágenes. Pero este lugar es precioso.
Saludos.