Boal. En el interior de la Asturias occidental, entre las sierras de la Bobia y Penouta, es un municipio y concejo con el paisaje más sugerente y bello que se pueden admirar
Etimológicamente procede del término latino “boalar”, terreno común destinado al pastoreo del ganado y lugar en el que se levantó la primera iglesia de la parroquia
Iglesia parroquial de Santiago Apóstol. Contruida a principios del s. XIX sobre otro templo anterior, una construcción sólida, de planta de cruz latina, con una sola nave que remata en cabecera plana, que nos recuerda al prerrománico
Ayuntamiento. Restaurado recientemente según el modelo de la arquitectura popular
No cabe duda que la crisis económica a finales del S. XIX encontró una válvula de escape en la emigración a ultramar, como tienen muy presente los boaleses de hoy
Boaleses que en 2014 recibieron de los Reyes de España en su visita a Asturias el Premio al Pueblo Ejemplar 2014. Pueblo y entorno merecen el reconocimiento
Laderas sombrías y abruptas pero a su vez impresionantes por la calidad del bosque
El río Navia cruza el concejo, siendo embalsado por el importante salto de agua de Doiras
LLamativas y fastuosas vistas que combinan praderías y bosque autóctono
Las vistas y la calidad del paisaje natural son espectaculares
Pendia, es: Caseríos habitados en medios rurales duros y bellos, de gentes dedicadas a la severidad y rigor del campo
Que a su vez nos deja imágenes tan bellas como estos hórreos de cubiertas de pizarra
Un lugar bucólico donde, desde la prehistoria, hubo gentes que se acomodaron y enraizaron aquí. De ello da fe el Castro de Pendía
Este castro, ha sido calificado de poblado enigmático por varias razones, a su ubicación topográfica inusual se añade la desproporción entre sus potentes fortificaciones y el reducido recinto que protegían
El poblado fue excavado en la década de los años 40, pero es desde el 2003 y hasta hoy, que se vienen desarrollando campañas anuales en el yacimiento durante el período estival, en las que se realizan trabajos de limpieza, excavación y restauración de las estructuras conservadas
Gran Cabaña, construcción de grandes dimensiones, bien protegida por varios elementos defensivos. Estas cabañas, que suelen ocupar emplazamientos relevantes en el urbanismo de los recintos castreños han sido interpretadas tradicionalmente como edificios de uso comunal
Esta sauna no ha conservado el vestíbulo de entrada, pero se aprecia perfectamente, como todas las saunas prerromanas del valle del Navia, que cuenta con un horno semicircular y cámara rectangular
En esta otra sauna, vemos como el baño cambia en época romana, haciendo más complejo el baño tradicional, justificando las reformas sobre los viejos recintos termales o la construcción de nuevas termas, como ocurre en Pendia. El edificio se divide en cabecera, cámara principal y vestíbulo de entrada
Un mirador en la carretera nos deja esta vista aérea del Castro de Pendia y comprender mejor el porque de las grandes defensas, lograr convertir en lugar seguro un emplazamiento tan vulnerable para sus habitantes
Mirador de Penouta, a una altitud de casi 800 metros, un mirador natural...
Que en días despejados permite admirar los valles que descienden hacia la rasa costera y numerosos pueblos de la marina ...
Y en días de niebla nos muestra una mágica e indescriptible sensación de aislamiento esotérico, solo la presencia de caballos y vacas que nos miran incrédulos nos sitúa en la realidad
Hoy vamos a acercarnos a otro concejo Asturiano, con la misma belleza paisajística y peculiaridades propias como es, El Franco
En el pueblo de La Braña, donde destaca su Santuario, la iglesia de Nuestra Señora de la Braña, del año 1700, coronada con una espadaña con 3 campanas, atrae a muchos fieles de la comarca, debido a la fama de sus milagros
Una sola nave que se llena en la romería del 15 de agosto con la gente de la comarca que asisten caminando y que pasan por el manto de la Virgen un ramo de tejo adornado con rosquillas y caramelos
Igualmente milagrosa y curativa es el agua que mana de la fuente, según reza la antiquísima tradición, en una vaguada sita a unos 200 m.
Los poco más de 50 habitantes utilizan este entorno como lavadero y punto de celebraciones festivas
Cuevas de Andía, Impresionante e inquietante Monumento Natural, una estructura pétrea compuesta por tres capas geológicas diferenciadas: calizas, areniscas y aluviones cuaternarios
El recorrido señalizado (que no se te ocurra abandonar), discurre entre una mezcla de especies propias de los bosques atlántico y mediterráneo
Subir y bajar entre laureles, castaños, madroños, acebos, tejos ..., que dan lugar a densas formaciones vegetales que escalan enraizando entre las fisuras de las rocas ...
Formando verdaderas sugerencias enigmáticas y a veces tenebrosas
Y en otras verdaderos abrigos bellísimos
Un valle semicerrado, cuyas aguas vierten al río del Mazo, afluente del río Porcía. En un suelo de praderías húmedas donde surgen pináculos calcáreos, escarpes y cuevas
En algún punto del recorrido, la ayuda es una cuerda a la que asirse, porque el suelo esta muy húmedo y resbaladizo ... pero que no te impida ver lo esencial
Galerías naturales que habrían quedado al descubierto entre los s. I y II d. de C. a causa de la explotación aurífera romana
El sector este del Monumento Natural se halla afectado por procesos de disolución subterránea de la caliza ...
Karstificación, que ha tenido lugar por acción química de aguas ligeramente ácidas durante decenas de miles de años
El paso por este anticlinal a través de la estrechez de sus paredes abruma
Las horas de visita están previstas durante las horas centrales del día, aún así, la luz es mínima debido a la espesa vegetación, acentuando la sensación tenebrosa
Todo el recorrido está muy bien articulado
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