Torla - Ordesa

Torla-Ordesa, denominada antes del 2014 como Torla, Torla-Ordesa es una localidad pintoresca, villa situada a 1033 m. de altitud, en la margen derecha del río Ara y uno de los pueblos más típicos de la zona pirenaica



Rodeado de cinco picos que van desde los 2000 a los 2848 metros, con sus laderas cubiertas de tupidos y verdosos bosques de pinos, es la entrada natural al Parque Nacional de Ordesa



Consta el pueblo de calles empinadas, en su mayoría con pavimento de losas o cantos rodados



Algunas casas sobresalen voluminosas y las características chimeneas de esta parte del Pirineo



Ayuntamiento, con clásicas ventanas geminadas, presentando esculpidos en piedra amplios portalones



Antigua casa abadía, donde se encuentra instalado el museo etnológico y donde pueden contemplarse pinturas murales del s. XVI



Casco antiguo, de raíces medievales, y que ha llegado hasta nuestros días en un magnífico estado de conservación



Guarda joyas de la arquitectura tradicional altoaragonesa, como el Casón de los Viu, palacio del s. XIV



La iglesia parroquial del Salvador con origen en el s. XIII, reconstruida, tiene una bella portada románica, torre adosada a la cabecera y cubiertas de pizarra contemporánea



El interior consta de tres naves, separadas por pilares cruciformes y con tres capillas laterales, a destacar el retablo del altar Mayor de estilo barroco



Restos del torreón o castillo que debieron construir los habitantes de la villa para defenderse de las primeras invasiones de los franceses durante el reinado de Juan II. Desde aquí se puede contemplar el Valle de Broto al Sur ...



Y la imponente mole de Mondarruego 2848 m. de altitud al Norte, en el interior ya del Parque Nacional de Ordesa



Pradera del valle de Ordesa, abierto y espacioso, con el Tozal del Mallo, altar natural, austero y grandioso al fondo



Pintado en matices según el tipo de su boscaje, como un regalo o un descanso para cualquier viajero



Un espacio natural que ya alcanzó la prerrogativa de Parque Nacional en 1918. Un espacio de los Pirineos, capaz de dar a los santos del cielo, nostalgia de la Tierra



El río Arazas, como hilo conductor, de un valle de estructura especial y aspectos geológicos singulares, relieve y forma características, determinadas por su naturaleza calcárea



Siguiendo el río contracorriente, hay un recorrido de unos 9 km. que nos lleva desde la pradera a la cascada de Cola de Caballo



Recorrerlo en otoño es pasear sobre una alfombra



Y el horizonte decorado con la paleta cromática del mejor pintor



Es uno de los itinerarios más populares del Pirineo, pero no por ello deja de sorprendernos cada vez que lo hacemos



Una pista muy bien señalizada y que discurre siempre por la margen derecha del río y de repente se abre una ventana y nos muestra uno de los saltos



Cascada de Arripas



El paisaje se va envolviendo en un celofán de aromas penetrantes, sonidos, luces y colores



Poco a poco vamos ganando altura



Y llegamos a la admirable Cascada de la Cueva



Y la no menos espectacular Cascada del Estrecho a poco más de 5 minutos



Mosaico variopinto donde destacan las dimensiones del escenario y su calidad ambiental



Escenario de una gran representación, denso en alicientes para los sentidos



Una pequeña zona abierta a modo de mirador donde podemos apreciar el espectacular colorido del bosque otoñal



Aquí disfrutaremos una vez más de las magníficas cascadas



Ahora es el oído el que se relaja con el discurrir monótono del agua



Que con su constancia va erosionado la roca formando pozas azules



Son inmejorables las oportunidades que da el río para un descanso, un tentempié y muuuuchas fotografías



Caminamos por un valle cada vez más estrecho



Camino de las Gradas cruzamos el bosque de hayas donde hay una fuente y un pequeño refugio



El bosque de hayas se hace cada vez más frondoso



El elemento más llamativo es el relieve. Pero a factor tan peculiar se unen el colorido, los materiales, la vegetación, los contrastes, las masas y las líneas




Circo glaciar por donde cae la cascada de la Cola de Caballo



Por encima del bosque se encuentran las murallas rocosas del Tozal del Mallo, Gallinero y Fraucata



Impresionantes telones geológicos para un escenario de ensueño




2 comentarios:

  1. Que preciosidad de imágenes y de lugar.. Que tengas buena semana..

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  2. Manuel no se que decirte que me gusto mas si la localidad o el paisaje. Creo que lo dejamos en empate.

    Saludos.

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